De niña me impresionó mucho la primera vez que mi padre nos contó la historia de la Batalla de Arica y la figura majestuosa del anciano coronel y su célebre expresión quedó grabada para siempre en mi memoria: "No nos rendimos. Tengo deberes
sagrados que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho”
Don
Francisco Bolognesi Cervantes nació en Lima un 4 de noviembre de 1816. Estamos
celebrando en este año, el Bicentenario de su natalicio.
Su padre fue un músico genovés, violonchelista, director de orquesta, don Andrés Bolognesi Campanella, quien se estableció en Lima y luego en Arequipa donde conoció a doña Juana Cervantes Pacheco, madre del héroe.
Según cuentan los historiadores: "Francisco Bolognesi se dedicó al comercio como su padre. Incursionó en la vida
militar algo tardíamente, a los 37 años y se retiró en 1871. Sin embargo al estallar la Guerra con Chile, se reintegró al ejército. Tenía 62 años.“Tengo deberes sagrados que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho”, dijo al mayor chileno, Juan de la Cruz Salvo, quien fue enviado por su país como parlamentario para solicitar la rendición de tropas peruanas en la batalla de Arica.
En su honor, con motivo del Bicentenario de su natalicio se han realizado una serie de homenajes, se ha presentado el himno “Gloria a Bolognesi”, creación musical del compositor José Escajadillo y el Banco Central de Reserva se sumó a ellos, con la presentación de la moneda conmemorativa de plata por el Bicentenario del Natalicio del coronel Francisco Bolognesi, Héroe nacional.
